sábado, 15 de octubre de 2011

¿QUÉ COSAS TE TIENEN PRISIONERO?

Reflexionemos con esta maravillosa historia de la india.

Dunichand era un mercader muy rico, orgulloso de sus riquezas y posesiones. Por cada negocio exitoso que realizaba hacía colocar una bandera en su techo. Varias banderas ondeaban en el techo de su casa, proclamando su fortuna al mundo. Un día su Gurú le dijo:
-Hermano ¿me harías un favor?
-Por supuesto Maestro ¿qué no haría yo por ti? dijo Dunichand con gran reverencia- ordena y tu sirviente te obedecerá.
El Gurú le dijo:
-Te doy esta aguja. Todo lo que pido de ti es que la guardes en un lugar seguro, y que me la devuelvas cuando nos encontremos otra vez en el próximo mundo.
-Será mi privilegio así hacerlo-dijo Dunichand.
Llevó la aguja a su esposa:
-El gran Gurú me ha encargado guardar esta aguja con seguridad y devolvérsela a él cuando nos encontremos en el próximo mundo- le dijo a ella.
Dunichand no se percató de las implicancias de la tarea que le encomendó el Gran Gurú.
Pero su mujer le dijo:
-¿Qué te pasó? como puedes tomar esta aguja y devolvérsela al Gurú cuando te encuentres con él en el próximo mundo? ¿Como puedes llevar esta aguja contigo?
Cuando esta comprensión le golpeo a Dunichand, exclamó:
-Es cierto ¿cómo puedo llevar esta aguja? ¡No puedo llevar nada! inclusive mis manos y mi cuerpo serán dejados atrás! ¿Cómo puedo llevar esta aguja conmigo?
Inmediatamente regresó a ver al Gurú y le dijo:
-Maestro este trabajo que me pediste que hiciera es humanamente imposible. ¿Cómo puedo hacer?¿cómo puedo llevar esta aguja conmigo y dártela en el próximo mundo?
Entonces el Gurú le dio una mirada que le penetró el corazón y dijo:
-Si no puedes llevar contigo ni siquiera una pequeña aguja ¿de qué te valen tantos millones?
Dunichand aprendió una lección de más valor que todas sus riquezas.

viernes, 14 de octubre de 2011

El Puente del Arco Iris


En memoria a mi amado Happy y a todas nuestras mascotas que nos dejaron, pero aún siguen en nuestro corazón:

El Puente del Arco Iris

Hay un puente que queda entre el Paraíso y la Tierra, y se llama Puente del Arco Iris.

Cuando un animal que ha sido especialmente amado por alguien aquí en la Tierra muere, entonces va al Puente del Arco Iris.

Allí hay valles y colinas para todos nuestros amigos especiales, para que ellos puedan correr y jugar juntos.

Hay mucha comida, agua y sol, y nuestros amigos se encuentran cómodos y al abrigo.

Todos los animales que han estado enfermos o que eran ancianos, recuperan su salud y vigor; aquellos que fueron heridos o mutilados recuperan lo perdido y son fuertes nuevamente, tal como los recordamos en nuestros sueños de días y tiempos pasados.

Los animales están felices y contentos, excepto por una pequeña cosa: cada uno de ellos extraña a alguien muy especial, alguien a quien tuvo que dejar atrás.

Todos corren y juegan juntos, pero llega un día en que uno de ellos se detiene de repente y mira a la lejanía. Sus brillantes ojos se ponen atentos; su impaciente cuerpo se estremece y vibra. De repente se aleja corriendo del grupo, volando sobre la verde hierba, moviendo sus patas cada vez más y más rápido.

Tú has sido avistado, y cuando tú y tu amigo especial finalmente se encuentran, los dos se abrazan en un maravilloso reencuentro, para nunca separarse de nuevo. Una lluvia de besos cae sobre tu rostro; tus manos acarician nuevamente la cabeza amada, y puedes mirar nuevamente a los confiados ojos de tu mascota, tanto tiempo apartada de tu vida, pero nunca ausente de tu corazón.

Entonces los dos cruzan el Puente del Arco Iris juntos... para no separarse nunca más.

Autor desconocido

Consuelo


El gran amor de Dios alivia mi mente y me proporciona consuelo.

Un niño con una rodilla raspada, un atleta olímpico que termina en cuarto lugar o una familia joven que pierde su casa, sienten diferentes tipos de dolor. En cada caso, el amor y el apoyo de un amigo querido o de un familiar les brinda consuelo. Mas aun hasta el amor más grande palidece en comparación con el amor incondicional y eterno de Dios. Cuando estoy triste, confío en que el amor divino sosiega mi mente y fortalece mi corazón.

Si siento dolor, la presencia de Dios en mí me brinda paz. Todos somos creaciones amadas de Dios y aunque en un momento podamos sentirnos descorazonados, el amor divino nos provee Su consuelo eterno.

Como aquel a quien consuela su madre, así os consolaré yo a vosotros.—Isaías 66:13

martes, 11 de octubre de 2011

Confianza


Recibo con confianza las oportunidades que la vida me ofrece.

Cuando un niño está aprendiendo a caminar, las caídas son más numerosas que los pasos. Mas caerse le ayuda, finalmente, a encontrar su equilibrio. Las caídas no descorazonan al infante. El apoyo y soporte de otros lo alientan a que continúe tratando. Practico esta lección al explorar mi potencial no descubierto todavía.

Siento gratitud por saber que cuento con el apoyo y la guía divinas según aprendo cosas nuevas y expando mis habilidades existentes. Cuando tengo dificultades, continúo avanzando con fe. Practico, progreso y prosigo con confianza. Al dar pequeños pasos hacia nuevas oportunidades, edifico mi confianza en los dones que Dios me ha dado.

Mucha franqueza tengo con vosotros; mucho me glorío con respecto de vosotros. Estoy lleno de consuelo.—2 Corintios 7:4

lunes, 10 de octubre de 2011

Creatividad


Diseño mi vida en cooperación con lo Divino.

En esta experiencia humana, ¿qué es lo que más me gusta hacer? ¿Qué hace que mi espíritu se remonte? Quizás sea bailar, cantar o tocar la guitarra. Tal vez dibujar, pintar o tallar madera. Cualquiera que sea la actividad, determino añadirla a mi rutina.

Expresar creatividad eleva mi espíritu y me llena de energía. Permito que el entusiasmo y los dones innatos cobren expresión. Mi mente y cuerpo se avivan a medida que me unifico con el poder creativo del Espíritu.

Permito que este poder irradie por medio de mí de maneras nuevas. Disfruto de una vida rica y abundante a medida que demuestro receptividad al continuo fluir de las ideas divinas que surgen de mi interior.

Y lo ha llenado del espíritu de Dios, en sabiduría, en inteligencia, en ciencia y en todo arte.—Éxodo 35:31

domingo, 9 de octubre de 2011

Paciencia


Hoy elijo demostrar paciencia, y ser compasivo y amable.

Cada día tengo la oportunidad de cultivar y fortalecer cualquier cualidad que elija. Hoy elijo desarrollar la cualidad de la paciencia. Al cocrear mi vida con Dios, determino ser paciente y saber que todo sucede a su tiempo. “Todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora”. Al afirmar salud, abundancia, paz y sabiduría, espero con aplomo la demostración. En el silencio de la oración, avivo la entereza y la seguridad del espíritu de Dios en mí.

En mi trato con los demás, ejercito el don divino de la paciencia. Vivo y trato a los demás con la bondad y la compasión que son el resultado natural de un corazón y una mente pacientes.

Vestíos, pues, … de entrañable misericordia, de bondad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia.—Colosenses 3:12

-La Palabra Diaria

viernes, 7 de octubre de 2011

Ahora


Ahora es el momento del Espíritu, de oración contestada, de bendiciones.

Al pensar en el eterno ahora, me doy cuenta de que el presente es un momento divino. En Dios no hay ni pasado ni futuro. Dios reconoce solamente el ahora, en el cual las oraciones son contestadas y los deseos satisfechos. Las bendiciones se manifiestan, se hacen visibles, se expresan y se hacen tangibles en el ahora.

Al vivir en el eterno ahora de Dios, puedo percibir las bendiciones que ya son mías. Nada puede impedir que mi bien venga a mí. Consciente del momento presente, ya no busco cumplir mis anhelos en el mañana. Sé que mi bien está aquí, hoy. Sólo tengo que aceptarlo para ver la manifestación. Vivo en el eterno ahora, recibiendo bendiciones del Espíritu a cada momento.

El tiempo se ha cumplido y el reino de Dios se ha acercado.—Marcos 1:15

La Palabra Diaria

Vida abundante


La abundancia no es una condición sino una actitud. Piensa en la pregunta muy popular: “Está el vaso medio lleno o medio vacío?” La manera como respondas puede darte una idea de tu conciencia de prosperidad.

En su libro Economía espiritual, Eric Butterworth explica: “La palabra prosperidad proviene de la raíz latina cuya traducción literal es: ‘según la esperanza' o ‘avanzar con esperanza'. De aquí que no es tanto una condición en la vida como una actitud hacia la vida”.

Sustancia universal
En en nivel espiritual, la abundancia es universal, omnipresente —por medio de la naturaleza, por medio del fluir infinito de inspiración, en tus relaciones personales con Dios y con los demás y en tu salud.

¿Crees que tu vida es abundante? Deberías hacerlo, porque la abundancia te rodea. Sigue tu guía interna para que reclames y disfrutes de todo lo que la vida te ofrece. Cada día es una oportunidad de avanzar para crecer espiritualmente, experimentar y lograr más que nunca. Tu mente está fértil con las ideas divinas y creativas. Estás rodeado por amor y sabiduría infinitos.

Éste es el momento de  traer esta conciencia de prosperidad a tu diario vivir. Al hacerlo, recuerda estas sugerencias apropiadas de Eric Butterworth:


  • Haz el compromiso de entrar y mantenerte en la corriente positiva de la vida.
  • Rechaza compartir conversaciones informales acerca de lo mal que está la economía, el alto costo de la vida o acerca de cualquier cosa a la cual no quieras decir “sí”.
  • Elimina de tu conciencia pensamientos tales como “no puedo”, “tengo miedo” y “no hay suficiente”.
  • Habla solamente de las cosas que quieres que vivan y prosperen.
  • Mantén tus pensamientos centrados en las ideas de abundancia, suficiencia y bienestar.
  • De vez en cuando, da a tu conciencia una dosis de optimismo al afirmar algo como: Dios es mi fuente de provisión instantánea, constante y abundante.

Recuerda, eres uno con Dios —la fuente de todo lo que necesitas.

Afirmación:

Dios es mi fuente, mi provisión todo suficiente. Tengo todo lo que necesito para nutrirme, sostenerme y prosperarme hoy y todos los días.

jueves, 6 de octubre de 2011

Corazón abierto


Abro mi corazón y oro por otros.

Durante Su ministerio, Jesús abrió Su corazón a las necesidades de otros y oró. Siguiendo Su ejemplo, incluyo a otros en mis oraciones. Bien esté en el trabajo, en la iglesia, en la tienda, conduciendo mi automóvil o haciendo los quehaceres del hogar, mantengo a otros en oración.

Mi oración puede ser tan sencilla como “Gracias” o “Dios te bendice”. Cada instante en el que dirijo mis pensamientos al espíritu de Dios en mí, es una oración. Siento gratitud por esos momentos, porque me permiten expresar mi fe y bendecir a las personas cuyas vidas tocan la mía. Mis oraciones son amorosas, compasivas y alentadoras. Al abrir mi corazón en oración, envío amor a los demás y me convierto en un canal para el bien.

No busquéis vuestro propio provecho, sino el de los demás.—Filipenses 2:4

martes, 4 de octubre de 2011

Paz Mundial

Vivo en paz con toda la humanidad.

Si veo las noticias o discuto los acontecimientos mundiales con amigos o compañeros de trabajo, puede parecer que existe violencia y caos en todas partes. ¿Qué puedo hacer para marcar la pauta?

La oración de San Francisco de Asís reza: “Que yo no busque tanto ser consolado, sino consolar; … ser comprendido, sino comprender”. Sigo estos consejos en mi vida. Oro también por líderes mundiales, para que tomen decisiones que fomenten la armonía. Al orar y meditar, acreciento mi don de la paz. Al avivarla, genero una energía sosegadora, y donde había estrés ahora hay calma. Conozco la Verdad; todas las personas son mis hermanos y hermanas, y podemos vivir en paz.

La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón ni tenga miedo.—Juan 14:27

-La Palabra  Diaria

lunes, 3 de octubre de 2011

Curación


La vida divina fluye en mí, sanando mi mente y mi cuerpo.

Dentro de cada semilla yace la esencia de todo lo que puede llegar a ser. La vida fluye, dirigiendo el crecimiento hacia su madurez. Si una estación es demasiado cálida o demasiado fría, las hojas del retoño quizás se encrespen, pero su esencia permanece fuerte. Con los nutrientes apropiados, la lluvia y el sol, nueva vida surge como hojas, flores y fruto.

Quizás yo esté pasando por una estación de duda, tristeza o retos físicos, pero es sólo una estación. La esencia de vida perfecta permanece en mí, lista para fluir como energía, salud y paz. Al orar abro mi corazón al fluir sanador de Dios en mí. Siento agradecimiento por las estaciones de curación en mi vida.

Sobre toda cosa que guardes, guarda tu corazón, porque de él mana la vida.—Proverbios 4:23

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Gozo



El gozo es mi manera de vida.

Al despertar durante esos primeros momentos consciente, elijo ser una expresión de gozo. Lo avivo a tener presente que su fuente yace en comprender mi unidad con Dios. En lo profundo de mi ser existen semillas de paz y felicidad que aguardan que las sustente. La gratitud cultiva el gozo. Doy gracias por las bendiciones en mi vida y aprecio a cada persona que comparte este viaje conmigo. Reconozco mis experiencias con la seguridad de que la vida es buena.

Las acciones positivas evocan alegría. Ser amistoso con otros y animarlos, es una manera de nutrir mi gozo. Hoy vivo completamente feliz, y mañana me despertaré con nuevo gozo en mi corazón para compartir.

Quedaré muy satisfecho, como el que disfruta de un banquete delicioso, y mis labios te alabarán con alegría.—Salmo 63:5 (Versión Popular)

(La Palabra Diaria)

martes, 19 de abril de 2011

Descanso en Dios.



Hoy pedimos descanso y una quietud que las apariencias del mundo no puedan perturbar.Pedimos paz y tranquilidad en medio de todo el torbellino nacido de sueños Conflictivos. Pedimos seguridad y felicidad, aunque lo que parece que vemos es peligro e infortunio. Y disponemos del pensamiento que responderá a nuestra petición con lo que pedimos.

Descanso en Dios. Este pensamiento te brindará el descanso y el sosiego, la paz y la quietud, así como la seguridad y felicidad que buscas. Descanso en Dios. Este pensamiento tiene el poder de despertar la verdad durmiente en ti que posees la visión que ve más allá de las apariencias hasta esa misma verdad en todo el mundo y en todo lo que existe. He aquí el fin del sufrimiento para el mundo entero y para todo aquel que jamás haya venido o haya de venir para estar aquí por algún tiempo. He aquí el pensamiento mediante el cual el Hijo de Dios nace de nuevo para reconocerse a sí mismo.

Descanso en Dios. Completamente impávido, este pensamiento te sacará adelante a través de tormentas y luchas, más allá del infortunio y del dolor, de la pérdida y de la muerte, y te llevará a la certeza de Dios. No hay sufrimiento que no pueda sanar No hay problema que no pueda resolver. Y no hay apariencia que no se convierta en la verdad ante los ojos de vosotros que descansáis en Dios.

Este es el día de la paz. Descansas en Dios, y mientras los vientos del odio dividen el mundo, tu descanso permanece imperturbable. Tuyo es el descanso de la verdad. Las apariencias no te pueden perturbar. Exhortas a todos tus hermanos a que se unan a ti en tu descanso, y ellos te oirán y vendrán a ti porque descansas en Dios. No oirán ninguna otra Voz excepto la tuya porque tú le entregaste tu Voz a Dios, y ahora descansas en Él y dejas que Él hable a través de ti.

En Él no tienes inquietudes, preocupaciones, agobios, ansiedades o dolor, ni miedo al futuro ni remordimientos por el pasado. Descansas en la intemporalidad, mientras que el tiempo pasa de largo sin dejar marca sobre ti, pues nada puede jamás alterar tu descanso en modo alguno. Descansa hoy. Y según cierras los ojos, sumérgete en la quietud. Permite que estos periodos de descanso y respiro le aseguren a tu mente que todas sus frenéticas fantasías no eran sino los sueños de un delirio febril que ya pasó. Deja que tu mente se aquiete y acepte con agradecimiento su curación. Ahora que descansas en Dios ya no vendrán a rondarte sueños de terror. Dedica tiempo hoy a ir más allá de los sueños, hasta llegar a la paz.

En los descansos que hoy tomas cada hora, una mente fatigada de repente se alegrará, un pájaro con las alas rotas romperá a cantar y un arroyo por largo tiempo seco manará de nuevo. El mundo renace cada vez que descansas y recuerdas cada hora, que viniste a brindarle la paz de Dios al mundo a fin de que pudiese descansar junto contigo.

Cada vez que hoy descansas cinco minutos el mundo se acerca más a su despertar. Y el momento en que lo único que haya sea descanso se acerca más a todas las mentes cansadas y exhaustas, demasiado agotadas ahora como para poder seguir adelante solas, Y estas mentes oirán al pájaro cantar otra vez y verán el manantial manar de nuevo, y con renacida esperanza y renovado vigor marcharán con paso ligero por la senda que de súbito parece más fácil de recorrer según siguen adelante.

Hoy descansas en la paz de Dios, y desde tu descanso exhortas a tus hermanos a que encuentren el suyo y descansen junto a ti. Hoy serás fiel a tu cometido, al no olvidarte de nadie e incluir a todos en el infinito circulo de tu paz, el sagrado santuario donde reposas. Abre las puertas del templo y deja que tus hermanos distantes y tus amigos más íntimos vengan desde los mas remotos lugares del mundo, así como desde los más cercanos; invítalos a todos a entrar y a descansar contigo.

Hoy descansas en la paz de Dios, tranquilo y sin miedo. Cada uno de tus hermanos viene a descansar y a ofrecerte a ti su descanso. Descansamos juntos aquí, pues así es como nuestro descanso es total, y lo que hoy damos ya lo hemos recibido. El tiempo no es el guardián de lo que damos hoy Damos a los que aún no han nacido y a los que ya partieron, a todo Pensamiento de Dios, y a la Mente en la que estos Pensamientos nacieron y en donde descansan. y les recordamos su lugar de descanso cada vez que nos decimos a nosotros mismos: 'Descanso en Dios'

-Un Curso de Milagros

jueves, 7 de abril de 2011

Adaptate a las circunstancias.


Adaptate a las circunstancias.
Deja que siga tal cual todo aquello que no te corresponde cambiar. Si lo que depende de ti necesita cambio, haz lo que puedas y quédate tranquilo.
No estas obligado a solucionarlo todo.

miércoles, 6 de abril de 2011

Elige palabras de alabanza


Considera tus palabras condenatorias. Nadie suele aceptar ni obtener beneficio alguno de las recriminaciones sobre su carácter o sus actos.
Elige palabras de alabanza y aceptación, palabras que construyen paz.

Carol Ann Morrow (Elogio de la paz)

jueves, 3 de marzo de 2011

La Paz

La paz viene sobre alas suaves


Llama con suavidad a los miembros de tu familia para acudir al teléfono, a la hora de la comida o por cualquier otra causa. Mas que mandar, invita; espera colaboración y no resistencia. Se paciente.
La paz viene sobre alas suaves, no sobre el estampido del trueno.

-Carol Ann Morrow (Elogio de la paz) 

miércoles, 2 de marzo de 2011

Elige el vocabulario de la paz


Habla con suavidad. Si adviertes violencia en tu lenguaje, piensa que todo procede de tu corazón.
Elige el vocabulario de la paz y la serenidad en lugar de palabras de condena, maldición, calamidad y queja.

martes, 1 de marzo de 2011

Carpe diem!


Aprovecha el día. No dejes que termine sin haber crecido un poco, sin haber sido un poco más feliz, sin haber alimentado tus sueños. No te dejes vencer por el desaliento. No permitas que nadie te quite el derecho de expresarte, que es casi un deber. No abandones tus ansias de hacer de tu vida algo extraordinario... No dejes de creer que las palabras, la risa y la poesía sí pueden cambiar el mundo... Somos seres humanos, llenos de pasión.

La vida es desierto y también es oasis. Nos derriba, nos lastima, nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia... Pero no dejes nunca de soñar, porque sólo a través de sus sueños puede ser libre el hombre. No caigas en el peor error, el silencio. La mayoría vive en un silencio espantoso.

No te resignes... No traiciones tus creencias. Todos necesitamos aceptación, pero no podemos remar en contra de nosotros mismos. Eso transforma la vida en un infierno. Disfruta el pánico que provoca tener la vida por delante... Vívela intensamente, sin mediocridades. Piensa que en ti está el futuro y en enfrentar tu tarea con orgullo, impulso y sin miedo. Aprende de quienes pueden enseñarte... No permitas que la vida te pase por encima sin que la vivas...

Walt Whitman

Conviértete en un puente, en lugar de ser una barrera


Guerras horrendas se han desencadenado por el control de un territorio o por el ejercicio del poder. Considera tu propia tendencia a poseer y ejercer poder sobre los demas.
Cuanto mas puedas prescindir de esa tendencia, menos ocasiones tendrás para turbar la paz con actos violentos.
Conviértete en un puente, en lugar de ser una barrera.

Reflexión


Reflexiono en el regalo de la presencia de Dios en mi vida.

El tiempo que paso en meditación es como una minivacación. Hago una pausa de mis actividades diarias para tomar en consideración algunas de las maneras en las que Dios se manifiesta en mi vida. Recuerdo el apoyo que he recibido hasta ahora en mi viaje por la vida. Pondero acerca de la mejor manera para compartir el amor que mora en mí.

Al pensar acerca de mi día, me pregunto: ¿qué será de importancia para mí dentro de un año? Recuerdo poner todo en perspectiva, tener presente aquello por lo cual siento agradecimiento. Un rato callado de reflexión me ayuda a recordar y apreciar las muchas maneras en que Dios se manifiesta en mi vida.

En la hermosura de la gloria de tu magnificencia y en tus hechos maravillosos meditaré. --Salmo 145:5

lunes, 28 de febrero de 2011

Dejar ir


Me libero de cualquier límite, y permito que el bien de Dios se expanda.

La televisión, las noticias, amigos y familiares; todos tienen opiniones acerca de la condición del mundo y de nuestro potencial en la vida. Hoy elijo dejar ir la influencia de las opiniones. Bien sea que los pensamientos de limitación provengan de afuera o de mi mente, decido no darles ni poder ni atención. Existe un poder creativo y divino en mí que es infinito.

Cuando no pongo límites a lo que soy capaz de crear, permito que el bien de Dios se expanda en mi vida. Experimento bendición tras bendición. Cada una de ellas es como una semilla lista para dar más --más amor, más salud y más prosperidad. Libre de pensamientos limitantes acojo las ideas divinas, y mi vida reboza del bien de Dios.

Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas sobre todo.--1 Crónicas 29:12

(La Palabra Diaria)

La paz ve semejanzas


La paz ve semejanzas entre la gente, no diferencias amenazadoras que construyen barreras. Identifica las diferencias --un valor, una actitud, una elección-- que te amenazan, pero procura comprenderlas.

domingo, 27 de febrero de 2011

¿Te respetas a ti misma?


"¿Te quieres, respetas y confías a ti misma?"

¿Puedes tu responder a esta pregunta con un innegable y rotundo ? 

La autoestima se trata del amor, el respeto y la confianza. Se basa en la satisfacción y la  confianza en sí mismo. El amor propio es la voz interior que te dice lo especial que eres, que puedes llegar a ser lo que quieras, y lo dice con convicción.

Aprender a amar incondicionalmente el verdadero tú, al igual que una madre ama a sus hijos, puede tomar tiempo. Pero puedes hacerlo! Lo sabrás cuando lo hayas hecho, porque tu autoestima se elevará y  serás más creativa, amable, cariñosa y extrovertida, como resultado.

Empieza a amar, respetar y confiar en ti misma en este momento, y nunca te detengas. Tu te lo mereces!

Jane Powell – Meditations for Women


 Afirmacion: "Me amo, respeto y confío en mi  misma".

Control


Golpear al gato, dar un portazo, dar un grito protestando, no son actitudes pacificas. Considera hasta que punto tus sentimientos explotan de forma inadecuada.
Controla esos sentimientos.

viernes, 25 de febrero de 2011

Decisiones


Mis decisiones están centradas en el Espíritu.

Quizás me sienta presionado a tomar una decisión apresurada. O puede que se me pida tomar una que no estoy listo para tomar. Aunque haya personas esperándome, me doy el tiempo que necesite. En vez de saltar para tomar una opción rápida, quizás decida no decidir.

En vez de forzarme tratando de elegir, decido crear un espacio para deliberar. Me doy tiempo para obtener claridad, ver lo que he podido no ver antes.

En este espacio, tengo tiempo para alinearme con el Espíritu y acoger Su guía. Con paciencia y confianza, me siento estable y seguro en cada decisión que tome.

Esforzaos todos vosotros, los que esperáis en Jehová, y tome aliento vuestro corazón. --Salmo 31:24

Acepta tu responsabilidad


Acepta tu responsabilidad cuando hayas ofendido a otros porque te faltaba paz interior.
Rectifica apenas te sea posible.

jueves, 24 de febrero de 2011

Paz mundial


El mundo despierta a la paz una persona a la vez. Contribuyo a la paz.

La paz mundial comienza conmigo. Mi presencia de paz tiene una influencia positiva en mi familia. Esta paz, a su vez, afecta positivamente la calle donde vivo y por ende estimula la paz en mi comunidad. De este modo, de persona a persona, la paz encuentra cabida en el mundo.

Elijo paz con cada decisión que tomo. Cuando llego a una encrucijada, siempre tomo la decisión que ofrezca paz. Dios me guía a pensar y actuar de maneras que promueven la paz. Avanzo con confianza con un corazón compasivo, amoroso y sosegado.

Como un pacificador, no espero que otros definan cuándo es el tiempo de expresar amor. La luz de la paz comienza conmigo.

Considera al íntegro y mira al justo, porque hay un final dichoso para el hombre de paz. --Salmo 37:37

Controla tu enfado


Controla tu enfado.
Los que te ofenden lo hacen a causa de su propia inseguridad, ignorancia y debilidad, no por su fortaleza.
Se fuerte y supera tu enojo disponiéndote a perdonar.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Perdonar


Gracias al don de la renunciación, perdono y soy libre.

Todo el mundo ha experimentado dolor en una relación personal. Sin embargo, unas personas parece que se reponen más pronto que otras. Las personas sabias saben que no pueden recibir el bien que desean hasta que perdonen. Charles Fillmore define la renunciación como: "Dejar ir los pensamientos viejos para que los nuevos puedan encontrar lugar en la conciencia".

Cuando dejo ir el pensamiento de que alguien tiene poder sobre mí, soy verdaderamente libre. El pasado no puede dañarme a menos que fije mi atención en él. Siempre soy libre para perdonar a otros. Al dejar ir el pasado, mis manos están abiertas para recibir. ¡Perdono, soy perdonado y soy libre!

Por tanto, si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial.--Mateo 6:14

Reconciliación


Cuando estas en conflicto con alguien, comienza por hacer las paces mentalmente.
Imagínate a ti mismo en paz.
Amplía la imagen lentamente hasta incluir a tu contendiente.
Guarda esa imagen en tu imaginación y Contémplala con amor de vez en cuando.

martes, 22 de febrero de 2011

EL VERDADERO VALOR DEL ANILLO



 

REFLEXIONES


Al parecer lo que cuenta a la hora de ser valorados por los demás, no es tanto nuestras cualidades más destacadas sino el nivel de autovaloración que uno tenga de
sí mismo. En realidad, lo que uno se considere a sí mismo, es justamente lo que los demás le considerará. 

Si una persona se considera atractiva y exitosa, y si además piensa que su compañía es un verdadero regalo para los seres que la tratan, no cabe la menor duda de que los demás, antes o después, la considerarán y pensarán exactamente así. Ni más ni menos. 

El pensamiento es un instrumento creativo y el hombre se convierte en aquello en lo que piensa. Sivananda 

Lo que hace años pensábamos que llegaríamos a ser en algún día futuro, bien sea en la profesión, en la afectividad, en la economía, en el desarrollo personal, en el poder de logro e incluso en la evolución espiritual, es justamente lo que hoy somos, ni más ni menos. Una consideración que sin duda, nos invita a dejar a un lado el “factor suerte” y asumir el poder creador de las propias creencias.

El listón y los límites se los pone cada cual en función de las creencias profundas de sí mismo y de sus propias posibilidades. En realidad uno mismo es creador, a menudo inconsciente, de su propio destino. 

En el relato de “El Anillo” sucede que mientras el muchacho piense que éste no vale, por más que trate de venderlo no transmitirá la carga de convicción a sus posibles clientes. Pues bien, el mismo proceso tiene lugar en la vida diaria con los sentimientos de seguridad o de inseguridad que acompañan a las acciones de la persona. 

No hay otra realidad que la que tenemos dentro de nosotros.
Herman Hesse

 

El amor a uno mismo está en relación con el grado de confianza y estima que uno hace de su persona. Una infancia con deficiencia de la Vitamina de Amor o bien en la que se ha despreciado y negado al sujeto, será un escenario propicio a la escasa autovaloración con la consiguiente instalación de la inseguridad. Merece la pena dejar muy claro a los hijos y, en general, a todos los niños, aspectos tales como que ellos son valiosos y amados, que realmente pueden hacer todo aquello que se propongan, que son muy queridos e importantes y que sus palabras y sus conductas merecen todo nuestro interés y respeto. 

Más tarde, cuando somos adultos, si nuestra autoestima no ha alcanzado el grado deseable, se convierte en una asignatura pendiente de la Inteligencia Emocional que conviene superar con sobresaliente ya que puede ser causa de dolor y tensiones soterradas que deben estar bajo control. Utiliza los talentos que poseas.
 
El bosque estaría muy silencioso si solo cantasen los pájaros que cantan mejor.
Henry Van Dyck

 
Conviene poner gran atención a las verbalizaciones totalizadoras con aspecto inocente que a menudo hacemos, como por ejemplo: “Qué tonto soy por no haber...” “Qué estúpido soy...” “Eres egoísta y torpe...”, “Soy incapaz de ...” “Siempre me pasa lo mismo, nunca aprenderé...” “yo nunca podré...” “Eres idiota...” 

Se trata de decretos negativos y reductores acerca de la identidad persona, y en realidad, aunque una parte de nosotros alguna vez “sea” eso, también en cualquier otra situación será lo contrario. Existen muchas partes o subpersonalidades de uno mismo, y todas tienen su momento y su función. 

Tengamos en cuenta que cualquier “decreto verbal” que hacemos acerca de nuestro ego personal, supone un mensaje a nuestro inconsciente que, a poco que se repita, se lo llegará a creer con suma facilidad con lo que procederá a conformar una creencia que, posteriormente, tenderá a convalidarse con pensamientos tales como: “Ya me parecía, compruebo una vez más que soy un inútil para...” o bien “Confirmo que logro todo lo que me propongo”  

Nuestra máquina de pensar se deja convencer por lo que sea, con tal de que se repita lo suficiente. George Gurjdieff  

Conviene evitar los decretos negativos que definen a nuestra persona y, en todo caso, cuando queramos referirnos a nuestros fallos, será más verdad el hecho de proceder a mencionarlos en términos tales como: “Una parte de mí se muestra insegura o bien, Una parte de ti se comporta de forma muy egoísta... A una parte de mi le cuesta mucho... Observo que una parte de ti no puede...” Sin duda, esta forma de expresión será más real que las totalizaciones habituales de: “Eres un egoísta” o “Yo soy muy inseguro”. 

El hecho de proceder sensatamente a subrayarnos las cualidades positivas que reconocemos en nosotros y asimismo subrayarlas también en lo demás, no debe confundirse con la arrogancia sino con el sano refuerzo de los procesos internos elegidos como saludables. De esta manera, nuestra mente las tendrá más en cuenta y las integrará en muchas acciones inconscientes. Por otra parte, el hecho de hacernos plenamente conscientes de nuestros logros, siendo benévolos con el propio proceso de aprendizaje existencial, supone también una manera eficaz de consolidar un buen nivel de autoestima. 

¿En qué he progresado hoy? ¿Qué cualidades positivas he expresado en el día de hoy?

Son dos preguntas que toda persona que quiera reforzar sus sentimientos de confianza y seguridad, debería formularse cada noche. En el caso de que se quiera optimizar el citado ejercicio convendrá que las respuestas se realicen por escrito, durante un período de 40 noches. De esta forma, el sujeto se verá obligada a repasar mentalmente el día vivido y consolidar los aspectos que su propia estadística precisa para una correcta valoración de sí mismo y un incremento del nivel de confianza y seguridad.  

Una vida no examinada, no merece la pena ser vivida. Socrates 

 El mensaje de “amor al prójimo” que se transmitió a través de los Evangelios, a veces no ha sido bien entendido ya que ha sido distorsionados hacia un “no quererse a uno mismo” por aquello de no caer en la vanidad y en la arrogancia. Tal distorsión, lejos de incitar a la generosidad terminaba por la negación a uno mismo en supuesto beneficio de lo ajeno. Una actitud que fue deteriorando la propia firmeza y asertividad de muchos creyentes, creando una gran inseguridad en el telón fondo de sus propios sentimientos. Esta errónea interpretación que, en muchos casos, sirvió para manipular, es particularmente triste, cuando en realidad, el mensaje del Evangelio fue “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. 

El término “como” señala implícitamente que aquella persona que no se estima ni valora a sí misma tampoco podrá considerar a los demás. Otra forma de decir que aquel que no se quiere a sí mismo, no puede querer a los demás. 

En la esfera de la propia identidad, conviene distinguir dos yoes: Por una parte, el yo superficial o ego que es de quien se habla en el relato, es decir, el que es susceptible de alta o baja autoestima. Se trata del “yo persona” que ha sido conformado con los datos del carné de identidad y que se basa en un conjunto de memorias. Y por otra parte, existe el Profundo, la identidad esencial, el Ser, que es común a todos los sujetos y que puede ser definido como Espíritu, Consciencia, Totalidad, Infinitud...  

Una persona no es una cosa, ni un proceso, sino una apertura, un claro a través del cual, lo Absoluto puede manifestarse. Ken Wilber 

Para facilitar la comprensión de este concepto se puede pensar que así como todas las joyas de oro adoptan formas diferentes al salir del crisol, anillos, colgantes, pulseras... sucede que, cuando un día vuelven al crisol y de nuevo se funden, todas ellas siguen siendo lo que siempre fueron y nunca dejaron de ser: Oro. Una esencia que no ha nacido ni morirá, más allá de la forma temporal. 

De la misma manera sucede en los seres humanos. La identidad superficial, Raquel, Pablo, Cristina, Goyo... son como cada joya que emerge del crisol, es decir diferente de otros seres humanos, pero ninguna de esas personas ha dejado de ser lo que en realidad somos esencialmente todos: Luz, Océano de Conciencia, Espíritu. Algo que simplemente ES. 

Un anillo de oro tiene en todo momento, al igual que cada ser humano, una dimensión “persona” que, en el caso del anillo, caduca con la vuelta al crisol, y en el caso del género humano termina con la muerte del psicocuerpo. Y también cada anillo de oro y cada ser humano respectivo posee una dimensión esencial. En este caso, dicha esencia será el oro para el anillo y, a su vez, el Espíritu para el humano que por su Infinitud está más allá del tiempo y del espacio. En realidad, la esencia ni ha nacido ni morirá, ES. Y su acceso a Ello se logra tan sólo mediante una determinada experiencia de totalidad. 

El trabajo del ser humano tiene dos esferas de cultivo. Por una parte, el aprender a valorar su propio ego, desarrollando la aceptación y la estima a su propia persona como “entidad psicobiológica con las horas contadas”, y por otra, operar sobre la amnesia de la joya que se cree anillo y ha olvidado que es oro, que siempre fue oro, y que siempre será oro. 

Algunos lo nombran como la búsqueda de uno mismo, otros lo refieren como la búsqueda de Dios. Y en este sentido el hecho de trabajar por esta búsqueda es lo mismo que anhelar la propia Infinitud que no es otra cosa que anhelar un estado de conciencia. Unos lo llamarán paz profunda y otros afirmarán que lo tenemos dentro, tal y como afirma la Escuela Taoísta al decir que “el hecho de buscar a Dios es como buscar un buey cuando resulta que uno está montado en el propio buey”. 

En realidad, el llamado trabajo espiritual, más que elaborar conductas morales llenas de premios y castigos en un ambiente de “modelos ideales”, se basa en el descubrimiento de la verdadera identidad. El desarrollo espiritual por excelencia consiste en trabajar en el despertar de nuestra amnesia de infinitud, y culminar en la certeza de que tenemos un ego, pero sabiendo que no somos solamente ese ego, sino que, en realidad, somos Totalidad e Infinitud que “tiene” y se proyecta a través de un ego. 

El que no cree en sí mismo es un ateo.
Anónimo

Sin duda, algo que en virtud de nuestra amnesia de lo esencial, no se logra experimentar como no sea en momentos en los que nos vemos expandidos en la llamada “Gracia”. Es decir a través de Experiencias con mayúsculas que llegan a la vida de los seres humanos con cuenta-gotas y, a menudo, sin aparentes méritos especiales. Es por ello que si todavía no somos rozados por el ala de ese insólito ángel llamado “Milagro”, convendrá que nos rodeemos de “despertadores” que nos remitan al Recuerdo.

Cuentos para Aprender a Aprender - Jose Maria Doria

Fe


Tengo fe en Dios y soy bendecido.

Cuando trato de definir la fe, muchas palabras vienen a mi mente. Experimento la fe como una creencia, un sentimiento, un ímpetu, una comprensión. Cuando mi fe es fuerte y está asida a Dios, todo es posible. Tengo presente que soy un ser espiritual, que nunca estoy solo y que nada puede separarme de Dios.

Al expresar mi fe, me siento divinamente protegido y dirigido. Tengo presente que mi Creador guía cada uno de mis pasos en el viaje de la vida y que todo es posible.

Mi fe vivifica mi entusiasmo y renueva mi energía. Siento el ímpetu de hacer más y ser más --mental, emocional, física y espiritualmente. Gracias a mi fe, soy bendecido más allá de toda medida.

Acerquémonos, pues, con corazón sincero, en plena certidumbre de fe.--Hebreos 10:22

Cuenta hasta diez!


Perturbar la paz es un crimen. Cuando te encuentres enfurecido, vociferando, pataleando e irritado por los pequeños contratiempos de la vida, detente!

lunes, 17 de enero de 2011

Sobre amar a tus enemigos...


Mantener una lista de enemigos agota tu energía y endurece tu corazón. Procura ver el bien que ve Dios; ama a tus enemigos. Cuando ya no queden enemigos, entonces habrá paz.